Método de RM diagnostica osteoartritis en sus etapas iniciales

Científicos de la Universidad de Nueva York (Nueva York, NY, EUA) presentaron sus hallazgos el 21 de Agosto de 2008, durante el 236º. Congreso Nacional de la Sociedad Americana de Química, realizado en Nueva York, NY, EUA. De lejos, la forma más común de artritis, la OA causa dolor articular y discapacidad a más de la mitad de aquellos de más de 65 años—aproximadamente 21 millones de individuos en los Estados Unidos.

Los métodos diagnósticos actuales usualmente no detectan la enfermedad hasta que la OA está en etapas avanzadas cuando el daño articular ya puede haber ocurrido. Un método para el diagnóstico temprano puede abrir una ventana de oportunidad para prevenir o reducir el daño permanente, particularmente con la evidencia de que suplementos dietarios como la glucosalina y la condroitina pueden detener la degeneración articular adicional, de acuerdo con Alexej Jerschow, Ph.D., que reportó la investigación junto con Ravinder R. Regatte, Ph.D.

"Nuestros métodos tienen el potencial de proporcionar signos de alerta tempranos para enfermedades del cartílago como asteoartritis, evitando así potencialmente la cirugía y la terapia física posterior”, declaró el Dr. Jerschow. "Además, la efectividad de las terapias tempranas de drogas preventivas pueden ser asociadas mejor con esos métodos”.

La osteoartritis, especialmente común en la rodilla y la cadera, daña el cartílago, el material elástico, duro, que amortigua las partes móviles de las articulaciones. La OA es la razón más típica para la cirugía de reemplazo total de cadera y rodilla. "Tiene todas esas consecuencias dolorosas y dificulta el movimiento- produce una pérdida severa de la calidad de vida para aquellos que son afectados”, declaró el Dr. Regatte.

La modalidad nueva de imagenología usa una forma modificada de resonancia magnética (RM) para determinar la concentración de un polímero conocido como glicosaminoglican (GAG), que contiene grandes cantidades de agua y le da al cartílago sus propiedades elásticas y su dureza. GAG también es reconocido como un biomarcador para la osteoartritis y la enfermedad discal degenerativa—una causa común de dolor de espalda. Según el Dr. Jerschow, se sabe que una concentración baja de GAG se correlaciona con el inicio de la osteartritis y otras enfermedades del cartílago.

El agente diagnóstico "rotula” los átomos de hidrógeno unidos a la GAGs de una manera que los hace emitir una señal que puede ser captada por una máquina de RM para determinar la concentración de GAG y evaluar la salud del cartílago. La OA avanzada es muy fácil de diagnosticar, puntualizó el Dr. Regatte. Así las cosas, sin embargo, el reemplazo articular puede ser la única opción. Con la detección temprana, los médicos pueden formular suplementos dietéticos, medicamentos, y otras medidas para evitar el daño adicional del cartílago. "Dada la falta de conocimiento acerca de la OA, pienso que cualquier método que sea no invasivo y relativamente fácil de aplicar será muy valioso. No solo se maneja el diagnóstico, sino que maneja cómo podemos entender el mecanismo de la OA”, dijo el Dr. Jerschow.

La exploración RM también puede ser usada para mejorar las drogas para mejorar el cartílago, existentes, de acuerdo con el Dr. Regatte. En el momento, es difícil evaluar la efectividad de esas drogas sin una herramienta diagnóstica para calibrar sus efectos sobre el cartílago. "Hay drogas en el mercado para el tratamiento de la OA, pero nadie sabe realmente qué tan efectivas son. Después de haber hecho la investigación, tuvimos una cantidad de llamadas de las compañías farmacéuticas que desean mostrar que sus drogas funcionan”, recalcó el Dr. Jerschow.

El costo y el tiempo que toma la prueba del cartílago es aproximadamente el mismo de una RM típica, según el Dr. Regatte. El diagnóstico puede ser dado en el mismo día. "Realmente espero que desarrollemos la técnica estándar de oro”, dijo el Dr. Jerschow. "Estoy complacido en decir con confianza que es uno de los mejores métodos que hay para probar la salud del cartílago”.

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New York University